viernes, 6 de abril de 2012

La encina de Briguel

Briguel se fué a la cama muy tarde, en el cielo la luna alumbraba su pequeña encina. La encina nunca daba muchas bellotas, por eso Briguel no estaba mucho de buén humor siempre, al amanecer Briguel salió al jardín como todas las mañanas a observar su encina. Entonces vió como dos ardillas robaban dos bellotas nuevas, entonces comprendió que las ardillas le robaban las bellotas siempre. Al día siguiente rodeó el arbol de una balla de hirro, pero las ardillas se las ingeniaban para pasar. Entonces llamó a Coneju su amigo el conejo gris, este hizo de guardia para que las ardillas no le cojieran las bellotas.Llegó la noche y las ardillas al verlo empezaron a cantar una nana sigilosa que el conejo gris empezó a dormirse poco a poco.Por la mañana Briguel al verlo se enfadó mucho con Coneju pero el para perdonarle le dió 24 bellotas de su despensa...

No había manera pero las ardillas siempre cojian las bellotas, Briguel se fué a la cama una noche más hata que hoyó el ruido y cojió un farol con polvo que habia colgado a lo alto de una madera y cojió también un hoz de arar la tierra, bajó sigilosamente las escaleras hasta la encina. Las ardillas no se asustaron de el y empezaron a cojer las bellotas, Briguel las observó detenidamente hasta que sin darse cuenta se fuerón. Briguel se fué a dormir y se pasó toda la noche pensando en que hacer con el caso, entonces la luz se fué pero a los 2 o 3 minutos volvió entonces en esa milésima a el también se le encendió la bombilla. Al día siguiente Briguel compró 4 sacos de encineras, compró una botellita de tiempo la cual la encina creceria muy deprisa, así se tiró hasta la dos de la tarde plantando encinas... Por la noche las ardillas al ver tanta bellota se pusieron muy contentas, Briguel entendió que ellas igual que el necesitaban comer así hasta todas las noches dos pequeñas ardillas rebolotean por unas garndes encinas llenas de grandes bellotas... Álvaro Ruiz.

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